Dermatoweb.net
Vídeos
 
Vídeos de cirugía dermatológica
  Bases     Cirugia     Crioterapia     Electrocoagulacion_curetaje  
Curetaje y electrocoagulacion   regresar

Obtenga el Flash Player para ver este vídeo.

Curetaje y electrocoagulación de carcinoma basocelular del cuello
El curetaje seguido de electrocoagulación sigue siendo uno de los tratamientos de primera elección de muchos carcinomas basocelulares, en especial si son menores de 1 cm y se localizan en el tronco. No es una técnica que precise esterilidad y puede realizarse con una buena antisepsia. Desinfectaremos el área a tratar con povidona yodada o clorehexidina (mejor si se disuelve al 5% en alcohol de 70º). Seguidamente infiltraremos la anestesia (p.e. mepivacaína al 2%) con jeringa de insulina y aguja de 30 a nivel intradérmico. Colocaremos la jeringa formando un ángulo de unos 15º con la piel e inyectaremos la anestesia hasta producir un habón generoso que rodee ampliamente todo el tumor ya que hemos de destruir unos 3 mm de piel clínicamente sana para asegurarnos la curación del mismo. El efecto de la anestesia así infiltrada es casi inmediato. Para el primer curetaje escogeremos una cucharilla de borde cortante y de diámetro suficiente para extraer la pieza lo más intacta posible para facilitar su examen anatomopatológico. Clave el borde cortante de la cucharilla sobre el borde clínico de la lesión y lentamente arránquela con el fin de extraerla a ser posible entera. En ocasiones debe clavarse el margen afilado de la cucharilla en varias zonas del borde del tumor para facilitar su extracción. Una vez obtenida la pieza para biopsia se realiza un nuevo curetaje con movimientos más rápidos con el fin de extraer pequeños nidos residuales tanto en los bordes de la herida como en el fondo de la misma. Con una cierta experiencia se notan las zonas donde quedan islotes tumorales friables fácilmente distinguibles de la firmeza del colágeno dérmico. Finalmente se realiza la electrocoagulación usando por lo general una punta en forma de bola de pequeño tamaño, usando una potencia media del electrocoagulador, cauterizando bien la base y unos 2-3 mm de piel sana perilesional con el fin de asegurarse de que no queden restos de tumor. Se desinfecta de nuevo la superficie con antiséptico y se cubre con gasa estéril. Una cura diaria con povidona durante unos 15 días es suficiente. Se formará una costra que caerá en unos 30 días dejando una cicatriz residual definitiva por lo general cosméticamente aceptable, en ocasiones mejor que la de la cirugía con bisturí. Algunos expertos aconsejan realizar un tercer curetaje, en especial en caso de tumores de mayor volumen.

buscador  
 
 
Dermatoweb.net    Web docente de Dermatología ------- Coordinación Dr M Baradad y Dr JM Casanova web design: kton y Cia